En la actualidad (abril 2025) encontrar un candidato para postular a los numerosas vacantes de empleo de topógrafo de campo es complicado en España. Todos los que estamos inmersos en el mercado laboral, de una forma u otra, decimos que no hay topógrafos. No somos suficientes para la cantidad de trabajo que hay ahora mismo en el país en todas las facetas de la profesión y sectores en los que somos necesarios.
Desde que comencé a tener conocimiento de la profesión he conocido tres momentos de máxima actividad: la construcción de infraestructuras para la Expo92 de Sevilla y las olimpiadas de Barcelona, la explosión de la construcción en los comienzos del siglo XXI y ahora. También he conocido otros dos instantes de estar bajo mínimos: el término de las obras del año 92 y la crisis del 2010. Esta última estuvo a punto, con un margen de días de hacerme salir en busca de otra profesión en el mundo del marketing y el social media.
Con ello, he podido ver en 30 años que la Topografía sufre de una estacionalidad que hace generar un gran selección natural, es decir, huida a otros sectores en épocas de crisis.
Otro hecho importante y comentado por el personal docente es que a pesar de la gran demanda, no hay alumnos y los que hay en su mayoría son de extranjeros.
Y es que la topografía no es una profesión muy sugerente y por lo tanto conocida en la sociedad. Si se sabe que cuando se ve a una persona con un palo y un aparato en un trípode hace mediciones, pero no que se adquieren conocimientos y atribuciones similares a otras ingenierías. Cuando yo fui seleccionado para hacer Ingeniería Técnica Topográfica en Madrid, alguien muy cercano me llegó a decir si lo que yo iba a hacer era un cursillo y no una carrera. La población conoce otras profesiones del ramo de la ingeniería o la construcción como son los arquitectos, ingenieros civiles, ingenieros industriales, pero no a los topógrafos.
Ante la falta de estudiantes, desde hace unos años, las universidades se han puesto a buscar candidatos en institutos, realizado campañas de publicidad, firmado convenios con instituciones, asistencias a foros de empleo, colaboración con empresas,.. Fórmulas de lo más diverso para que no ocurra lo que la última crisis, que había más profesores que alumnos. Tengo que decir, ya que conozco el entorno de la universidad, que lo están logrando.

Pero a pesar que ya haya una cantidad aceptable de alumnos, los que consiguen egresar no son suficientes.
Ante esta situación, algunos responsables de empresas me han llegado a decir que se están planteando ir a buscar topógrafos fuera de España, acudir a países asiáticos ya que se dice que son muy buenos y adaptados a la obra. Aquí habría que ver los marcos regulatorios y vencer los choques culturales e idiomáticos.
Otro problema que se suma a lo que estoy hablando es que se dice que la mayoría de los topógrafos tenemos el pelo blanco y que no hay relevo generacional por lo comentado antes de aulas vacías, pero también es el hecho del descenso demográfico.
La topografía tiene un gran desafío por estas cuestiones en la «zona occidental» del mundo, porque este problema no es solo a nivel de España, sino de Europa y América del Norte.
El avance de la tecnología, como hablaba en artículos anteriores, ha venido a mitigar la falta de profesionales ya que los trabajos se hacen con menos recursos humanos y el que sea más sencillo usar los instrumentos también hace que no sea necesaria una alta especialización.
Con todas estas variables intuyo que se presenta un gran cambio de concepción de la profesión. Una profesión que en la actualidad tiene a todos sus profesionales empleados y desconoce si dispondrá de suficiente relevo generacional para cubrir la gran necesidad del ser humano: saber dónde está en el mundo y cuanto mide lo que le rodea.
Para la reflexión de este artículo me he inspirado en:
Geomática, la ingeniería más desconocida con cero tasa de paro https://www.laprovincia.es/sociedad/2025/03/20/geomatica-ingenieria-desconocida-cero-paro-ulpgc-115522353.html
Topógrafo: una profesión de pleno empleo pero sin demanda https://www.canalextremadura.es/noticias/extremadura/topografo-una-profesion-de-pleno-empleo-pero-sin-demanda
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Pues por lo que se comenta por bastantes topógrafos, que en las obras son maltratados, con jornadas interminables, sueldos miserables y una profesión nada agradecida.
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Debieran ofrecer esa carrera virtual hay muchos topógrafos impiricos y cadeneros, que no estudian por qué el la labor de topografía es 100% campo y en zonas rurales, se le dificulta a esas personas ñ, asistir presencial.
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Muy cierto la falta relevo generación no solo es una problemática en europa , también lo es en Latinoamérica, con la gran diferencia que el nivel académico aquí es inferior a Europa. Amo mi profesión y ya quisiera poder capacitarme y trabajar en Europa.
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